El trabajo invisible de las Madres de Día

Al educador: sé quién eres.
Busca el camino y aprende quién eres
cuando quieras entender a los niños.
No pienses en lo que debas ser,
piensa en lo que puedas ser.
Debes ser un ejemplo sólo en aquellas
cosas en las que puedas ser un ejemplo.

 Janusz Korczak

Dani Jones

Hace ya 4 años que vengo remando para sacar adelante este proyecto, y no sólo mi proyecto, si no para dar a conocer esta profesión, la de madre de día y ofrecer alternativas más respetuosas con las necesidades de la infancia. Sin duda este trabajo es lo más satisfactorio que he hecho a nivel profesional y me ha permitido unir mi experiencia como madre, con mi formación, sintiendo que no dividía mi vida personal/familiar/laboral sino que era una formación a todos los niveles, un proyecto vital.

Claudia Tremblay

Sinembargo, siento que mucho de lo que hacemos las madres de día es todavía- cada vez, menos- invisible. En realidad es invisible como muchas de las pequeñas grandes cosas que hacen las madres, todas las madres en general. Ya sabemos que los cuidados no están muy valorados en nuestra sociedad, pero a veces me sorprende tanta ceguera, tan poco reconocimiento puede llegar a tener cuidar a nuestros niños, nuestros mayores, nuestros enfermos,...
Pero no voy a hablar en general, voy hablar de lo particular, voy a sacar a la luz (la luz del blog) el trabajo invisible que hacemos las madres de día.

Roberta Briatico

Formación

Mónica Carretero

Las madres de día somos profesionales tituladas. Sí, pero no nos quedamos ahí sino que estamos en continua- formación-continuada, ¿porque? pués porque nos apasiona nuestro trabajo, y porque cada niño que llega a nosotras nos supone un desafío y necesitamos nuevas herramientas, y revisar nuestras formas de actuar y materiales de juego y revisar nuestra forma de relacionarnos con las familias, los niños y nosotras mismas.  Y porque en la formación también encontramos el enriquecimiento que necesitamos de otras personas y que al trabajar solas buscamos en compañeras y otras profesionales que nos puedan mostrar su visión y su forma de hacer.

Difusión

Cada vez que explicamos a qué nos dedicamos terminamos haciendo una breve charla de la profesión de madre de día y de las necesidades de la infancia. No podemos evitarlo, pero además lo disfrutamos, sobre todo si son preguntas que nacen de un interés real y nos escuchan con corazón de madre.

Mónica Carretero

Pero es que además de esas charlas improvisadas en el parque o en la calle, organizamos charlas para dar a conocer esta alternativa educativa. A algunas de nosotras ni se nos hubiera ocurrido ponernos a hablar en público si no fuera porque realmente este tema nos mueve y remueve.

Muchas también nos hemos sorprendido participando en las redes sociales, diseñando cartelitos y hasta escribiendo en un blog. La "maternidad de día" se ha apoderado de nosotras.

Organización

Las madres de día nos ocupamos de todo, quiere decir que además de planificar el día a día como cualquier familia, hay que organizar los espacios, las actividades, los papeles, seguros, plan de emergencia,...que todos tengan sus pañales, ropa de recambio, la cremita, los chupetes, la comida, los horarios,...todo

Diseño de espacios. Decoración

Para las madres de día el espacio es un elemento educador más, no es sólo decorativo, aunque le demos mucha importancia a la estética del espacio no es sólo algo superficial. Disponer los materiales de determinada manera, crear espacios bellos, acogedores, que inviten a jugar  es un trabajo continuo, porque el espacio crece y cambia con los niños y con las estaciones. Un espacio donde todos nos sintamos cómodos y seguros que se crea y se transforma a diario.

Elección/fabricación/compra de material

Materiales no estructurados, juguetes que ofrezcan muchas posibilidades, para juego simbólico, para crear, para manipular, para la motricidad fina, gruesa, para trabajar hábitos, para ....Que sean bonitos, seguros,...
El material siempre está rotando, siempre estamos creando, fabricando, buscando qué ofrecerles

Actividades

El juego libre es la actividad principal, pero cada tanto ofrecemos actividades, éstas son pensadas en función del grupo de niños y sus necesidades e intereses en ese momento. Hay que probarlas previamente y no nos cuesta mucho ponernos a modelar con plastilina casera, buscarle el punto a la pasta de sal, probar la pared de agua,...sólo hay una manera de garantizar el éxito de la actividad: jugar nosotras primero! Nuevamente, más planificación, organización y evaluación.

Mantenimiento y limpieza

Esta es la tarea más engorrosa y que pasa más

Penélope Dullaghan

desapercibida. Diariamente el espacio debe volver a quedar más o menos como al principio del día y si no vienen los duendecillos que recogen y limpian, nos toca a las madres de día hacer de limpiadoras de tarde/noche. Los fines de semana solemos aprovechar para las limpiezas más profundas, lavar juguetes, sábanas, toallas, baberos,...

Seguimiento individual de cada niño

Arianna Floris

Llegamos a conocer muy bien cada niño y seguimos paso a paso su crecimiento y evolución. Realizamos observaciones, anotaciones ... En función de esas observaciones diseñamos y seleccionamos actividades y material de juego que puedan satisfacer las necesidades de cada uno de ellos en el momento en el que se encuentran.

Lucia Maciullo

Comunicación y atención a las familias

Las familias son parte de nuestro proyecto y nos gusta que se impliquen, poder comunicarles diariamente cómo ha estado su niño, y que ellas también nos puedan contar y compartir inquietudes, hablar los temas que les preocupen y buscar soluciones juntos. La relación con ellas no se rompe y seguimos en contacto más allá del tiempo que permanezcan sus niños en el proyecto.

Jack Long

Encuentros con familias, reuniones de la asociación, comisiones de trabajo

Como ya saben los que nos siguen, en cada estación en el bosque de Gulubú organizamos un encuentro con las familias es una reunión relajada y lúdica, que nos permita encontrarnos fuera de la rutina habitual y compartir tiempo, charlas y juego.

Además está el trabajo en la asociación (Llars de criança) que está haciendo una labor increíble para conseguir el reconocimiento de esta alternativa educativa, informando, formando,...Las asambleas de la asociación nos implican un desplazamiento, tiempo y energía pero también nos dan fuerza, respaldo y acompañamiento en nuestro día a día.
A los encuentros con las familias y las asambleas de la asociación también hay que sumar las reuniones con otras madres de día cercanas, éstas suelen ser largas charlas  con té y merienda de por medio en las que comentamos nuestro trabajo, nos asesoramos mutuamente, consensuamos formas de funcionar, resolvemos dudas, organizamos charlas, nos enriquecemos, nos reímos, y en fin, COMPARTIMOS.

Mónica Carretero

Y más allá...

Y ¿cuando no estamos trabajando? nos pasa que igual estamos pensando en ellos, ...Dirán que no sabemos desconectar, puede ser, pero aunque tengamos muy claro hasta dónde llega nuestro trabajo, la relación que tejemos con ellos cada día no es de quita y pon,  y así vamos por la calle y pensamos cómo le gustaría ver ese camión a "A" o cómo querría perseguir las palomas "Y", el entusiasmo de "G" al ver la "mulassa", esta canción le encantaría a "A" que apenas camina pero ya baila...y otra cosa que nos pasa es que no podemos evitar ponernos tristes cuando se van, aunque sabemos que tienen que seguir su camino y nosotras acompañamos sólo un trocito de ese recorrido, cada uno de los gulubitos ha transformado algo en el bosque que permanece...

Más allá de las horas que estamos con los niños, hay todo un trabajo detrás que lo hace posible y que muchas veces no se conoce, a veces ni nostras mismas nos lo reconocemos, ¿cuántas horas trabajas? ¿cuentas sólo desde que llegan los niños hasta que se van?
Esta entrada empezó a gestarse en mi cabeza un domingo de limpieza y se alimentó de charlas con mis queridas compañeras Montse y Judit (La Petita Tribu ; Arrels i Vincles), no pretende ser un reclamo o una queja si no sólo hacer visible ese pequeño trabajo de hormiguitas que es lo que muchas veces mueve las grandes cosas.

Claudia Tremblay

Hay quien desde afuera le parece un trabajo fácil o cómodo, quedarse en casa y cuidar niños. Pero hacerlo con la dedicación, cuidado, responsabilidad y compromiso con el que lo hacemos las madres de día requiere mucho trabajo personal. Claro que nos compensa, porque hacemos lo que nos gusta y por eso también ponemos todo nuestro corazón en ello.

Mónica Carretero