El bosque de Gulubú

El bosque de Gulubú
Sarah Preston

"¿Ustedes vieron esos libros-sorpresa que cuando uno los abre aparecen figuritas de pie?

Bueno, igualito es el bosque de Gulubú. Como las marionetas dormidas. Uno le tira de los hilos y ellas se ponen de pie, bailan y se mueven.

El bosque de Gulubú está planchado en el suelo, y cuando su dueño tira de los alambres, los árboles y los yuyos y las casitas y los bichos aparecen todos como diciendo:

Aquí estamos. Estábamos jugando a la escondida. "(...)


"Por eso, si ustedes alguna vez encuentran detrás de un árbol, o detrás de cualquier cosa, a un inspector enanote y sabihondo que les dice que no es posible que existan un enanito y 7 Blancanieves, o que no es posible que exista cualquier cosa linda, ustedes pueden contestarle:

–Sí señor, existe, en el bosque de Gulubú."


Dailan Kifki

Maria Elena Walsh






domingo, 31 de diciembre de 2023

Que se celebre la vida

"Desde pequeños nos preguntan qué demonios queremos ser de mayores. Como si en ese momento no fuésemos nada. Como si la infancia no fuese un capítulo en el que o aprendes a volar, o vives bajo tierra de por vida. "   

                                  Marguerite Duras

 

Lisa Aiaato

 
Dejémosles volar y ser quienes ya son. Dejemos de ver la infancia como si fueran proyectos de personas futuras, ellos ya son personas completas y competentes. Son importantes ahora, no por quienes serán en un futuro. Esta mirada no es algo banal, cambia nuestra manera de entender la educación y la crianza, nuestra manera de tratarlos y comportarnos con ellos. Y cambia sobre todo la importancia que le damos a su actividad principal: el juego y a como atendemos sus necesidades y cuidados. El juego entendido como actividad autónoma de desarrollo que les pertenece, es su forma de expresión y de hacer suyo el mundo y no debería ser nunca interrumpida, manipulada, ni pervertida con algún supuesto importante objetivo pedagógico. Pues de esta manera pierde su esencia y queda a expensas de satisfacer la voluntad adulta. Acompañar la infancia de esta manera supone un baño de humildad, de reconocer que ellos son los expertos y nosotras estamos para asistir, proporcionar las condiciones óptimas y los materiales necesarios, un clima de calma y seguridad que posibilite que den rienda suelta al juego y la exploración. Estar presentes y atentas a lo que puedan necesitar pero sin intervenir, ni solucionar, ni guiar el juego. Y por otro lado atender sus necesidades de cuidado con presencia, tiempo, haciéndolos partícipes, sin mecanicismos ni prisas.

 Pero vamos ya, antes que se nos termine el año, a mostrarles como han "volado" nuestros gulubitos esta primera parte del curso....

Empezamos en septiembre, como siempre a nuestro ritmo pausado, todavía despidiendo el verano y dando la bienvenida a una nueva gulubita,...


Octubre estuvimos celebrando el otoño, descubriendo sus colores, como cambian los árboles, las frutas, los animales... También hicimos pan y otros experimentos


 

Ah, y muy importante nos juntamos las familias en nuestro Encuentro de Otoño. Visitamos el Parc Samà



Y ya llegando noviembre, celebramos la castanyada, Samhain y un cumple2 muy especial con panellets, castañas y velitas


En Noviembre jugamos mucho


También salimos a explorar el parque y fabricamos nuestro farolito

 

Llegó diciembre y experimentamos con nieve (de bicarbonato, por aquí no hemos visto otra), y preparamos el solsticio de invierno, Navidad o Yule. Preparamos adornos naturales para la casa, una rueda de adviento en la que cada semana dedicamos a un reino, mineral, vegetal, animal y humano. Una estrella para colgar en la ventana, decoramos avetos de madera,....También preparamos un zumito de naranjas, fue divertido exprimirlas nosotros mismos, servir y degustar


 

Para el encuentro de invierno fuimos todas las familias a buscar al Tió


Lo trajimos a casa, lo cuidamos mucho, le dimos muchas mandarinas y ciruelas y el último día invitamos a todos los gulubitos para celebrar Yule, el solsticio de invierno 



 "La calidad de un jardín no se mide por su extensión, riqueza vegetal o ambición sino por el significado y el bienestar que aporta a quien lo cuida. Esos entornos de cariño pueden ser grandes o pequeños, humildes o suntuosos, exuberantes o sobrios, pero deben satisfacer nuestra necesidad de vínculos tangibles. Más que una burbuja en la que refugiarse de la realidad, los jardines son un lugar donde soñar con una vida más hermosa y justa."                                             

Santiago Beruete 

Brooklyn Swenson


Un hogar de crianza es como un jardín, no se mide por su extensión, o caras que sean las instalaciones y los materiales, sino por el significado y el bienestar que aporta a quien lo cuida y a quien es cuidado, a la madre de día, a las infancias y sus familias ( y a la comunidad, pues toda la sociedad se  beneficia de una crianza amorosa). Son sin duda entornos de cariño, más grandes o pequeños, más exuberantes o sobrios pero deben satisfacer nuestra necesidad de vínculos tangibles. Y no, no estamos creando una burbuja alejada de la realidad (como dicen los defensores de la vida es dura y cuanto antes se endurezcan mejor), son un lugar donde soñar crear una vida más hermosa y justa. Acaso un grupo de familias creando y criando juntas no son algo muy fuerte y poderoso? No solo estamos criando criaturas respetadas y sensibles sino que nos estamos cuestionando y cambiando para ser adultos respetuosos, respetados y sensibles. No es trabajo de un día ni de uno solo, nos educamos juntos, crecemos juntos.

 

Y ahora sí nos toca despedir el año, estos son nuestros deseos, que se celebre la vida...

 "Que se celebre la vida, sí, sin olvidar que está hecha de ausencias, frágil, como una rama quebradiza tendida sobre un abismo.
Que las ilusiones no sean mezquinas sino plurales, incluso imposibles.
Que el mundo no avance tanto, tan ciego, tan duro, tan implacable.  
Que abracemos a los nuestros y a los que parecen ajenos, distantes.
Que haya paz, pero no desmemoria.
Que todo sea más amable.
Que no solo se desee para uno, sino para otros.  
Y no únicamente hoy, ahora mismo, sino también ayer, anteayer, mañana y después de mañana."

 Carlos Skiliar


 

Daniela Drescher

 

martes, 15 de agosto de 2023

El último verano

 

Lisandro Rota
"No recuerdo cuándo fue el último verano.
No hablo del verano pasado sino del último verano.

El último verano de ver copular a las mariposas.

El último verano de ponerse por primera vez las sandalias del último verano.
 

El último verano de chillar de gozo al descubrir abierta la heladería que sólo abría los veranos. No lo recuerdo.
No recuerdo cómo fue el último verano en que nos zambullimos por primera vez en la piscina del último verano.

Suzy Lee
El último verano en que corrimos hacia el agua clorada del último verano.
El último verano en que advertí el aroma de los tilos del último verano.

No recuerdo cuándo comí los últimos higos ni cuándo caminé descalza por las baldosas mojadas del patio del último verano ni cuál fue el último verano en que me sorprendió el dolor de los hombros quemados por el sol del último verano.
No recuerdo el mar del último verano.
No recuerdo los vestidos del último verano. 
Graciela Rodo Boulanger
No recuerdo la navidad ni la sal ni el sudor del último verano.
Sé que hubo un último verano y sé que estuve ahí, cuando todos llevábamos las rodillas raspadas y los vestidos cortos y los pantalones rotos y el pelo sucio y los dientes blancos, y sé que fue el último verano de aprender las primeras cosas, de respirar por última vez el susurro transparente de las uvas, de ser por última vez un puñado de héroes que desconocían la derrota.
Después fue el tiempo de guardar las bicicletas, de no volver a contemplar estrellas, de cuidarse del rocío y de la lluvia, de temer a la intemperie, de ver morir.
Hay unos versos de Ezra Pound que dicen:
“Y los días no están
lo suficientemente llenos/
Y las noches no están
lo suficientemente llenas/
Y la vida pasa como
un  ratón de campo/
Sin agitar la hierba”.
Son versos que hablan de la vida adulta.
En este mundo sin antídoto para el mal del tiempo, los recuerdos que no tengo del último verano me traen un rescoldo del aroma del agua, el pudor de una brasa donde todavía fulgura la cuenca dorada de toda aquella miel. "

 Leila Guerreiro *

Phoebe Wahl

 

Cuando pienso en recuerdos felices de mi niñez pienso en el verano. No en los veranos de ahora, en los veranos de vacaciones eternas, el tiempo era otro, las sensaciones tan intensas que al recordarlas todavía podemos sentirlas. No como algo perdido, sino como algo atesorado. No niego cierta nostalgia, pero lo siento como algo ganado, conservado, mio para siempre. Será como decía Dostoievski que "el que acumula muchos recuerdos felices en su infancia está salvado para siempre" 

Muchas de esas sensaciones las revivo viendo a los gulubitos jugar y experimentar. Y también me sirve para saber que las cosas que recordarán serán las más simples pero vividas y compartidas desde la emoción. No es necesario unas vacaciones de lujo, ellos no recordaran la calidad del hotel, sino las baldosas mojadas del patio de casa.... 

Susana Hoslet

 

Así, traer a la memoria los recuerdos del último verano nos sirve, no solo para renegar de esa vida adulta que nunca parece estar lo suficientemente llena, sino para poner en valor lo que de verdad importa, lo que de verdad nos llena y nuestros pequeños pueden ser un buen catalizador para reconectar con eso.

 Y ahora que ya los dejé sintiendo el juguito de la sandia chorreando por el codo y la barbilla y los pies hundiéndose en la arena cuando la ola se va ... vamos con el resumen. 

Lo dejamos a mediados de abril, estábamos muy metidos con los ciclos de la vida...

Habíamos plantado semillas de girasoles, se acuerdan? no? vuelvan a la entrada anterior! y saben qué ? crecieron, crecieron, y crecieron (los gulubitos y los girasoles), y florecieron (los girasoles, los gulubitos no), y dentro de la flor cuando se secó adivinen qué! 


y ahora hay que retroceder hasta la primavera pasada para recordar a nuestros gusanos de seda. Guardamos en una cajita unos huevitos diminutos que esta primavera eclosionaron y pudimos ver crecer desde 0 las oruguitas hasta mariposas, y vuelta a empezar. Es la segunda generación de gusanos de seda de Gulubú. No dejan de sorprendernos, maravilla, maravilla

No se nos olvida celebrar Sant Jordi, libros nunca faltan en Gulubú, y también hicimos puntos de libro autografiados, y rosas y dragones...
 

Coincidiendo con la celebración en nuestra ciudad de la Fira del circ, el Trapezi; en Gulubú, que somos un poco payasos y equilibristas, montamos un circo con carpa y todo y muchos desafios. Ah y también hicimos nuestras propias pelotas de malabares rellenando globos con arroz


En el bosque de Gulubú nos encantan los pájaros y siempre les dedicamos tiempo, libros, y actividades para conocerlos, cuidarlos y amarlos. Este año además colaboramos con SOSvencejos* y amadrinamos un vencejito rescatado, al que bautizamos como Gulubú y pudimos seguir su evolución y crecimiento hasta su liberación, fue muy emocionante y aprendimos muchas cosas sobre los vencejos:: son un ave protegida, consumen hasta 800 insectos al día, lo hacen todo volando, hasta dormir, solo se posan para criar, y vuelven siempre al mismo nido ( si no se lo han tapado) después de volar 20.000 km desde Africa




 Las abejas también fueron protagonistas de nuestros descubrimientos


Tuvimos unos días que todo era violeta, lila, azulado y es que trabajamos con una flor que huele muy bien y atrae mucho a las abejas y mariposas pero ahuyenta a los mosquitos, moscas y polillas....la lavanda! hicimos unos saquitos para poner entre la ropa o debajo de la almohada


Y ya con el calor del verano los juegos con agua tomaron protagonismo

Experimentamos con las flores de la buganvilla y descubrimos que teñian el agua de rosa, casi fucsia

Otro gran tema que nos gusta trabajar en verano es el mar. Los animales marinos nos fascinan y aprendemos a reconocerlos

Y con tanto calor, a quien no le apetece un helado?

Creatividad para construir, destruir, imagina...con material reciclado

Durante todo el año pintamos de mil maneras, pero en verano nos encanta pintar con todo el cuerpo y por todo el cuerpo

Este soy yo, soy un poco grande pero un poco pequeño, estos son mis pies, el pelo, llevo un collar y aquí está mi corazón..

Dibujar nuestra silueta y pintarla, una actividad para integrar el esquema corporal y divertirse


El encuentro de gulubitos de verano fue en la playa, qué bien nos lo pasamos grandes y pequeños!
 

Y llegamos a final del curso casi sin darnos cuenta, una vuelta más de esta rueda mágica. Cerramos esta etapa como nos gusta, todos juntos, con los gulubitos más grandes y más chicos, en una fiesta sin protocolos, con espacios de juego abiertos y pica pica saludable a su alcance, juegos de agua, pintura, coches, piscina de bolas, ...con mesa grande para comer todos juntos mientras nos explicamos cosas y abrazos y regalitos emocionados para despedirnos, y recordarnos, y extrañarnos


"Somos como somos porque fuimos bosque. En realidad somos un bosque que un día se bajó de las ramas y echó a andar"

Joaquín Araujo


¡FELIZ VERANO!!

Vito Cano


*1  LEILA GUERREIRO

https://cadenaser.com/nacional/2023/07/23/el-ultimo-verano-cadena-ser/ 

Escritora y periodista. Su trabajo se publica en diversos medios de América Latina y España: La Nación y Rolling Stone, de Argentina; El País, de España; Gatopardo, de México, y El Mercurio, de Chile, entre otros. Es editora para América Latina de la revista mexicana Gatopardo.

En 2005 publicó el libro Los suicidas del fin del mundo y en 2009, Frutos Extraños.

En 2013 publicó su tercer libro, Plano americano, en Ediciones Universidad Diego Portales, Chile, una recopilación de veintiún perfiles de personas iberoamericanas relacionadas con el arte y la cultura.

 

*2  SOS VENCEJOS https://www.instagram.com/sosvencejos/?hl=es

domingo, 16 de abril de 2023

Primavera sorprendente

 

Lisa Aisato*
 

 

Instrucciones para vivir 

una vida:  

Prestar atención.

Sorprenderse.

Contarlo


Mary Oliver

 

 

 

 Si no nos lo enseña una poeta, esto también lo podemos 

aprender de las infancias. Porque ellas aún no han olvidado como 

vivir una vida. Están atentas, se dejan sorprender y asombrar por

el mundo y necesitan contarlo, compartirlo para darle significado a

a todo. Por eso es tan importante nuestro acompañamiento, 

nuestra presencia, que nuestra mirada se pose sobre lo que a 

ellas les sorprende y les vayamos regalando palabras. Tan  

simple y tan complicado, acostrumbradas como estamos a dirigir, 

guiar, señalar, apurar, estimular, corregir....Sin darnos cuenta que 

eso las deja sin curiosidad, sin motivación, sin iniciativa, sin 

asombro (sin vida!)


Según Melina Bronfman*, quien en sus inicios trabajó y defendió la 

estimulación temprana, pero hoy está convencida que la 

estimulación produce retraso, parálisis emocional y aleja al bebé 

de su esencia para llevarle a reaccionar y satisfacer a un adulto

insistente y exigente, hay 5 caracterísitcas observables en un 

bebé estimulado:



1 El bebé siempre mira al adulto, nunca mira lo que hace. 

2 Mira al adulto en búsqueda de aprobación o de acción. Es el 

adulto quien propone. 

3 No juega por su cuenta (no sabe generar ideas ni proyectos). 

4 No sabe concentrarse a largo plazo porque está acostumbrado 

a ser interrumpido).

5 Al no tener iniciativa, se vuelve exigente con el adulto, pidiéndole 

actividades permanente, a la vez que está constantemente 

irritado o frustrado.

 "No conviene iniciar un camino del que querrás regresar" 

Emmi Pikler

 

Entonces, cómo educar? cómo acompañar? cómo criar en el 

asombro? No es fácil pues estamos condicionadas y 

presionadas a cumplir unos objetivos, a demostrar nuestro 

trabajo como educadoras.

Nos dice Catherine L'Ecuyer, para que uno se pueda asombrar, 

precisa ser libre interiormente. Eso en bebés es fácil, pero en 

niños de 2-3 años ya observamos condicionamientos externos, 

querer satisfacer al adulto o delegar en el adulto el juego, 

pidiendo instrucciones sobre cómo jugar o exigiendo que le 

diviertan y entretengan. 

Hay que crear las condiciones favorables para que pueda 

descubrir por sí mismo, con una mínima estructura que facilite la 

invención y el descubrimiento. Eso sí, ese entorno debe tener 

unos límites claros.

Esto puede verse en "el caos controlado del juego libre", el 

espacio y el material con las normas de convivencia son la 

estructura pero qué y cómo jugar corresponde al niño. 

Demasiadas veces se confunde esa libertad, y el niño acaba 

decidiendo qué hay para comer o dónde va la familia a veranear, 

pero no puede decidir como construir con los bloques porque hay 

un adulto proponiendo vamos a hacer una casita así o asá...

 

 

"El juego es el contexto por excelencia en el que los niños pueden

dar rienda suelta a su curiosidad. En definitiva, aprender desde 

dentro hacia fuera." 

Catherine L'Ecuyer


El juego es libre o no es juego, añadiría yo...




Y en ese contexto es que en el bosque de Gulubú preparamos

las propuestas, invitando a jugar en un entorno que despierte 

la curiosidad, sin decirles cómo o qué hacer con el material 

dispuesto, eso lo averiguaran ellos...

 

Estas fueron algunas de las propuestas:

 

Nubes de papel

 

Metros y metros de papel, montañas

 de papel, rollos de papel, 

papelitos para empapelarse, 

desenrollarse, envolverse, taparse, 

juntar papel, romper en trocitos, 

vestirse con papel, saltar en 

un prado empapelado....



Espuma y colores

Mezclas y texturas sorprendentes, la pintura en los goteros crea una lluvia de colores sobre la espuma blanca y suave. Y empezamos a mezclar y ver qué pasa


Carnavaleando

 


Máscaras, pinturas, disfraces, 

sombreros...y espejos

quien quiere disfrazarse y de qué

lo deciden ellos

Experimentamos con gelatina de agar agar

Nuevas texturas, nuevas posibilidades...
 


Imbolc


Imbolc celebra los días cada vez más largos. La semilla que bajo la tierra empieza a germinar




Nosotros tejemos una cruz de Brigid y añadimos elementos a

la mesa de invierno, que poco a poco empieza a tener algo de

primavera...




La magia de sonar

 

Cómo se llama el ruido 

de la campana, 

dindorindorolindo, 

cómo se llama.

Cómo se llama el viento 

sobre la palma, 

y el oscuro tan hueco 

bajo la cama.



David Chericián



Y celebramos la música, la magia de sonar, con este taller familiar

tan especial que nos ofreció Mercedes Docampo*

 


 

 Manipulando legumbres y macarrones


En lo más sencillo y cotidiano hay miles de posibilidades

 

Un día de lluvia

Lisa Aisato

 

"Pican, pican las goticas

Sobre mi tejado 

Y dibujan caminitos de color 

plateado

Ya lloviendo está (pican, pican las 

goticas)

Ya lloviendo está (sobre mi tejado) 

Rin, rin, rin, rin (y dibujan caminitos)

Ya lloviendo está (de color plateado)"

 

Paraguas, caracoles, canciones, nubes, gotitas, rayos y truenos, el 

arcoiris! Cuántas cosas para sorprendernos en un día de lluvia!



 Un ramo de Mimosas

 Qué es un ramo de mimosas? bolitas amarillas, redonditas, 

mulliditas, ...las miramos, las tocamos, pintamos con puntitos 

amarillos, pegatinas redondas, bolitas de papel...


 

Galletitas 💓 

 

Ay corazón de arroz
cuando llega la hora
me da la tos.

Tropiezo con las semillas de la naranja
me pierdo en un lunar.
Lengua de papel
me ahogo en un vaso
brazos de trapo
frente a este mar
al que cruzo
entre peces con bocinas
para llegar
a la vereda tendida
a la orilla de la esquina
por la que vas a pasar.

Laura Devetach
 

 

El amor es algo rico, tierno y dulce, hecho con paciencia y corazón,

como estas galletitas que cocinamos juntos y compartimos con la

familia



 

 

Girasoles

 

 

Lisa Aisato

 

Plantamos semillas de girasol, ya germinaron y todavía los 

estamos cuidando y regando esperando que florezcan 



 

 

Parque

 

El parque es nuestro patio, y parqueando descubrimos como 

la primavera va llegando...


 Varita mágica de primavera

 Cortamos estrellas de cartón, les hicimos agujeritos con el punzón (con mucho cuidado!) le atamos un palito y pasamos flores por los agujeros. La agitamos para que florezcan todos los campos, parques y balcones:

Magia, potagia 

la primavera ya está aquí,

que florezcan los campos, mi balcón y tu jardín

Chimpún, chimpún, chimpín!


Flores

Prohibido arrancar flores.        Pueden acariciarlas, despeinarlas, dibujarlas en un cuaderno si lo desean, pero sin arrancarlas del papel después.

Pueden inventarles pétalos, espinas,
vaporosos mamuts polinizadores alrededor,
pero no golpes de viento ni cortacéspedes
que pongan en peligro su existencia.
Prohibido darles de comer a las flores
porque pueden ponerse grandes y cariñosas,
seguirles a sus casas, dormir en sus puertas, ladrar casi
hasta que les dejen entrar y llenárselo todo de colores,
y eso, señores topos, está terminantemente prohibido,
al igual que robar motas de polvo con los ojos para llorar. 

Elena Román, por el bien de los jardines

 

Descubrimos como son las flores (estas ya estaban cortadas), por adentro, sus estambres, el polen, muchos pétalos de colores que pintan...


Chocolate

Pintamos con chocolate! Dos cosas favoritas de los gulubitos juntas: pintar y el chocolate, genial!


Ostara

Equinoccio de primavera, celebramos el regreso de la luz y el despertar de la naturaleza de su letargo invernal, también la Pascua con huevos pintados, plumas, pollitos y una rica "Mona"

 


Encuentro de Primavera

Cada cambio de estación hacemos una salida todas las familias juntas, para reencontrarnos con los gulubitos que ya no vienen al proyecto y para compartir y explorar cosas nuevas. Esta vez fuimos a la fiesta de la Primavera en el refugio de animales Món La bassa*. Nos gustó ver que cada animal tenía un nombre y una historia, que sin duda había mejorado al llegar al refugio, donde se los veía felices y tranquilos. Nos hicimos amigos de las cabras Copi y Choni, de las vacas MariCarmen y Macarena. Y nos conmovió las historias de un cerdito salvado al caerse de un camión, una jabalí que no puede mover sus patas, y una yegua ciega. Y los cerdolís, cruce de cerdo vietnamita y jabalí.

Después compartimos charlas, juegos y comida

 

Y seguimos!

Si me leíste y te gustó (o no), y quieres compartirlo deja un comentario, te leo



 

* Las bellas ilustraciones que acompañan esta entrada pertenecen a Lisa Aisato

* Melina Bronfman

*Taller de Música, Mercedes Docampo
*Mon La Bassa