El bosque de Gulubú

El bosque de Gulubú
Sarah Preston

"¿Ustedes vieron esos libros-sorpresa que cuando uno los abre aparecen figuritas de pie?

Bueno, igualito es el bosque de Gulubú. Como las marionetas dormidas. Uno le tira de los hilos y ellas se ponen de pie, bailan y se mueven.

El bosque de Gulubú está planchado en el suelo, y cuando su dueño tira de los alambres, los árboles y los yuyos y las casitas y los bichos aparecen todos como diciendo:

Aquí estamos. Estábamos jugando a la escondida. "(...)


"Por eso, si ustedes alguna vez encuentran detrás de un árbol, o detrás de cualquier cosa, a un inspector enanote y sabihondo que les dice que no es posible que existan un enanito y 7 Blancanieves, o que no es posible que exista cualquier cosa linda, ustedes pueden contestarle:

–Sí señor, existe, en el bosque de Gulubú."


Dailan Kifki

Maria Elena Walsh






lunes, 9 de diciembre de 2013

Popurrí de otoño

Las cinco ventanas.
Los cinco mensajeros del alma, de la inteligencia.
Los caminos para ir de adentro a afuera, procesar y encontrar.
A ese que habita donde los sentidos llegan.
A ese que sale para crecer con lo que siente.
A ese que un día sabe y conoce, porque primero sintió.

Magdalena Fleitas









Los períodos sensibles

Montessori descubrió que los niños pasan por fases de interés y curiosidad intelectuales, que ella denominaba "períodos sensibles", en las que aspectos concretos de su entorno los facinaban y absorbían.
Pensemos en nuestros niños, muchas veces nos damos cuenta que se "obsesionan" con algo que acaban de aprender o estan intentando aprender y ponen todo su interés en eso. Pueden pasar dos cosas, que pensemos que eso no es importante, y desviarle su atención a otras cosas que pensamos que tendría que estar aprendiendo. O aprovechar esa oportunidad única para dotarle de material y oportunidades para practicar lo que le está interesando en ese momento.



Cada período sensible motiva a los niños para que fijen su atención en algún aspecto particular de su entorno. Es posible aprender algo fuera del periodo sensible, por supuesto, pero nos costará mucho más esfuerzo.

Durante un período sensible, los niños pueden aprender cosas nuevas, dominar nuevas destrezas o desarrollar aspectos de sus capacidades y de forma casi inconsciente.

Observando

La única manera de saber cuales son las necesidades e intereses de un niño en un momento determinado es observándolo. Con regularidad, centrándonos en lo que está pasando en este momento y sin interferir. Qué juguetes elige, cómo los utiliza, cómo se relaciona con los otros, cómo se mueve por la casa, ...



Y después

La mayor parte del tiempo que los niños pasan en el bosque de Gulubú es de juego libre en el espacio preparado (tiempo en el que yo observo y acompaño), otra parte importante del tiempo la ocupamos en rutinas: paseos, siestas, comidas, cambios de pañal,...pero también hay un ratito en el que propongo alguna actividad que surge también de la observación de sus necesidades e intereses. A veces acierto y esa actividad tiene éxito, participan y la disfrutan, otras veces no, no les interesa, no quieren ensuciarse o prefieren sólo observar. Otras veces la actividad se transforma y pasa a ser otra, y eso está muy bien porque nos abre a otras posibilidades que surgen espontáneamente de su propia iniciativa.





"El niño que tiene libertad y oportunidad de manipular y usar su mano en una forma lógica, con consecuencias y usando elementos reales, desarrolla una fuerte personalidad." 
 María Montessori




Algunas de las actividades que hemos hecho este otoño...

Panellets

Los panellets son un dulce típico catalán de estas fechas (coincidiendo con la Castañada), son fáciles, ricos y utilizamos ingredientes típicos del otoño.

La receta:
 moniato hervido y aplastado (200g más o menos)
almendra molida (200gr)
azúcar (150gr)
piñones, coco o almendras para decorar

Lo más divertido es ensuciarse las manos y formar las bolitas. Pero también hay que respetar que alguien no quiera participar y prefiera observar en primera fila.
 

Hojas secas

Cada estación del año nos trae algo diferente, tiene un color y una temperatura propia. Fijar nuestra atención y valorar los tesoros que nos trae nos conecta con la naturaleza.


                                  Recogemos hojas secas en nuestros paseos.


 Las observamos, las agujereamos y las rompemos a trocitos que guardamos con cuidado quizás para otra actividad.




Pintura

Pintar con hojas, manzanas, dedos,...



Fabricamos nuestra propia pintura. Nos quedó un poco espesa, pero agradable de manipular,una nueva textura, una experiencia diferente, colores únicos...




Psicomotricidad

Surge espontáneamente, jugando, bailando, saltamos y nos tiramos al colchón, giramos, damos palmadas, nos metemos dentro del tunel de tela, pasamos por un aro, corremos, nos escondemos,...





El juego simbólico

" Los juegos son herramientas para la libertad"
Luis Pescetti

El juego simbólico es una experiencia vital de la infancia que posibilita transformar, crear otros mundos, vivir otras vidas, jugar a ser otros, y así aprender a pensar como los otros, a sentir como los otros y, en definitiva, a saber que existen formas de pensar y sentir diferentes a la propia.
Se desarrolla de formas muy diversas entre los 2 y 7 años, aunque hay una etapa previa de juego presimbólico entre los 12 y los 20 meses, en la que empieza a identificar el uso funcional de objetos cotidianos y realiza acciones o gestos asociados con esos objetos fuera del contexto real en que son usados.
El juego es un gran facilitador y muchas de las cosas que los niños viven pasivamente, las hacen activas jugando. Las vuelven a vivir, pero como actores y directores. Muchos juegos aparentemente sin sentido tienen una gran profundidad y hablan de procesos internos. Es frecuente que las actuaciones con los muñecos revelen qué pasa en su mundo. Al volver a vivir las situaciones, pueden elaborarlas, entenderlas y buscar soluciones.




Motricidad fina

La motricidad fina es aquella que utiliza los músculos pequeños del cuerpo como los de los dedos. Ésta va desarrollándose desde el nacimiento, cuando el bebé puede coger un objeto con toda su mano por un acto reflejo. Posteriormente pasa a agarrar los objetos de forma deliberada y va dominando y coordinando sus propios movimientos cada vez con más precisión. Más tarde empieza también a manipular todos los dedos posibilitándole actividades más complejas como realizar la pinza. Actividades como rasgar, cortar, pintar, apilar objetos, colorear, enhebrar y otras especialmente las que se utiliza de manera coordinada ojo, mano y dedos son clave para la adquisición de aprendizajes importantes para un buen desarrollo posterior de la lectoescritura.
Afortunadamente los niños, si se encuentran en el período sensible y tienen al alcance los materiales adecuados ejercitarán por sí mismos estas habilidades sin que esten programadas en el curriculum o que los educadores nos propongamos que trabajen para tener una buena letra en el futuro. ¿Cómo? Jugando, comiendo, vistiéndose, recogiendo algo del suelo, poniendo, sacando, abriendo, cerrando,...





Y una reflexión sobre las actividades que proponemos a los niños. Ideas hay muchas, y por internet podemos encontrar mucha inspiración, pero a veces podemos encontrar mucho más sentido en lo que hacemos si pensamos en lo que nos gustaba hacer a nosotras de niñas, lo que aprendimos de nuestras madres, abuelas, compartimos con hermanos. Cosas sencillas con las que disfrutamos y ahora nos gustaría compartir, transmitir a nuestros niños, que forman parte de la cultura de una familia.


El bosque de Gulubú recibe visita

El bosque de Gulubú está en constante cambio y transformación, con las estaciones, las lunas,... marchan algunos "gulubitos" y llegan otros. Nos gusta mucho seguir conectados y que los "gulubitos" que por circunstancias varias pueden ahora estar con sus mamás vengan esta vez de visita...





  Enlaces de interés:

Actividades con hojas
El desarrollo de la motricidad fina 
Psicomotricidad. Verónica Anton
María Montessori 

2 comentarios:

  1. Un beso desde Francia del gulubito OTTO y su mamá !

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  2. Gracias, Paloma! Siempre nos acordamos de vosotros, sois parte del bosque de Gulubú. Besos

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